Felices
Fiestas y…
próspero
año 2022
(II)
*España es el país de Europa que más radares
tiene
En
las vías de titularidad estatal, según datos de la Dirección General de Tráfico
(DGT), hay actualmente un
total de 1.324 radares (694 fijos, 550 móviles y 80 de tramo. Hay 3,4 radares por cada 1.000 km
cuadrados lo que nos sitúa muy lejos de países
como Bélgica o Malta, donde se controla la velocidad con más de 66 radares por
cada 1.000 km cuadrados, quedando España en la mitad de la tabla como noveno país con más radares de
Europa.
Como
podemos ver tal afirmación es falsa
Las
pruebas para la detección de la posible intoxicación por alcohol consistirán normalmente
en la verificación del aire espirado mediante alcoholímetros que determinarán
el grado de impregnación alcohólica. Después de haber bebido alcohol, la alcoholemia alcanza su punto
máximo entre 30 y 90 minutos después de haber tomado la última copa. A partir de ese momento la alcoholemia
desciende en la sangre, aproximadamente, a un ritmo casi constante de 0,2
gramos de alcohol por hora.
No existe ningún truco para
engañar a estos aparatos. Son falsos los siguientes remedios:
ü Masticar chicle, tomar café, té o aceite, porque este aparato mide el aire alveolar.
ü Hacer ejercicio,
porque aunque se acelera el metabolismo y se elimina más rápido el alcohol por
el sudor, el tiempo entre la primera y la segunda prueba es tan corto que no
permite hacer efectivo este método.
ü Dormir un poco, porque
el cuerpo ralentiza el metabolismo y se elimina más lento el alcohol. Para que
sea eficaz se debe dormir acorde al consumo de alcohol consumido, es decir que
si tenemos una tasa de alcoholemia de 1 gramo de alcohol por litro de sangre
deberemos de dormir al menos 5 horas para reducir sustancialmente esta tasa.
ü Vomitar, porque
el alcohol se encuentra distribuido en la sangre y en el estómago solo estará
el alcohol que no se ha digerido.
Por consiguiente este aserto es falso
* El adelantamiento deberá efectuarse siempre por la izquierda.
Falso. Si existe espacio suficiente,
el adelantamiento se efectuará por la derecha adoptando las máximas precauciones:
·
Cuando el conductor del vehículo al que se pretenda adelantar
esté indicando su propósito de cambiar de dirección a la izquierda o
inmovilizar el vehículo en ese lado.
·
En las vías con circulación en ambos sentidos, a los
tranvías que marchen por la zona central.
·
En las vías urbanas, en calzadas con al menos dos carriles
en el mismo sentido de marcha, delimitados por marcas longitudinales, se permite
el adelantamiento por la derecha a condición de cerciorarse de que se puede
hacer sin peligro alguno para los demás usuarios.
*Circular
a velocidad excesiva no siempre aumenta el riesgo de accidente
En el binomio movilidad - seguridad, la velocidad de circulación es una de
las principales causas de accidentes y víctimas en el tráfico, y por ello, su
prevención por exceso de velocidad es uno de los aspectos más estudiados y
debatidos por la comunidad científica en relación con la seguridad.
Se ha demostrado en un gran número de estudios científicos que existe una clara
relación entre velocidad y accidentalidad, aunque no de forma exacta porque ya que
depende de un gran número de factores.
En niveles superiores a 50 km/h, el número de colisiones disminuye un 2%
cada vez que la velocidad media se reduce en 1 km/h.
La relación entre el exceso de velocidad y la frecuencia y gravedad de los
accidentes de circulación es un hecho aceptado y demostrado por numerosos
estudios científicos, y reconocido por los principales organismos
internacionales en materia de tráfico.
El Modelo Potencial, propuesto por el
experto en seguridad vial sueco Göran Nilsson –y
aceptado académicamente formula que un
aumento del 1% de la velocidad media, manteniendo todos los demás factores de
influencia constante incluida la intensidad de tráfico, produce aproximadamente:
• Un aumento del 4% de los accidentes mortales.
• Un aumento del 3% de los accidentes mortales y graves.
• Un aumento del 2% de los accidentes con víctimas de cualquier
severidad.
Además, en ciudad, la DGT recuerda
que el riesgo de muerte para un peatón se reduce un 75% cuando el conductor
circula a 40 km/h en lugar de a 50
km/h, y en más del 90% si va a 30.
Otro dato importante a tener en cuenta es que el 85% de
las muertes en ciudad son a vulnerables (peatón, ciclistas y motoristas)
ü A 80 km/h fallece
casi el 100%
ü A 50 km/h fallece el
50%
ü A 30 km/h solo
fallece el 5%
Si reducimos la velocidad
reduciremos el número y la gravedad de los accidentes.
Por todos estos datos se puede concluir que la afirmación es falsa
(I)
Un bulo es una noticia falsa propalada con algún fin. Una
“Leyenda Urbana” es una historia que se mueve entre la ficción y la realidad.El
término fue acuñado en 1968 por el estadounidense Richard Dorson, quien definía la leyenda
urbana como una historia moderna «que nunca ha sucedido, contada como si fuera
cierta».
Para que una historia ficticia se
convierta en leyenda urbana es preciso que se difunda de forma espontánea como
verdadera y que la información alcance cierto reconocimiento popular.
Es frecuente escuchar en la jerga popular la expresión “eso es un cuento chino”.
Ocurre cuando se duda de la veracidad de un relato porque tiene más de fantasía
que de realidad o porque simplemente los datos no cuadran; en definitiva,
cuando es mentira.
Sean bulos, leyendas urbanas o
simplemente cuentos chinos, el darles veracidad supone ponerlos en práctica en
alguna ocasión, pero tenga en cuenta que le puede costar un accidente o un disgusto
económico, es decir, una multa por transgresión a la Ley de Tráfico.
He aquí algunos que, ya sean bulos, leyendas urbanas o cuentos
chinos, circulan de boca en boca y a través de las redes sociales.
Intentaremos, con esta entrada y las que le seguirán, argumentar
si son ciertos o falsos con la voluntad, por un lado, de promover el correcto conocimiento de las normas de circulación
y de otro, sacar a más de un conductor o conductora de alguna creencia falsa que pudiera tener.
*
La mayoría de accidentes se produce por el mal estado de la carretera.
El principal causante del accidente es el factor humano. Distracciones,
alcohol, drogas, fatiga, velocidad excesiva… provocan entre un 80 y un 90 % de
los siniestros.
Es
falso afirmar que la mayoría de accidentes se produce por el mal estado de la carretera.
Es un
tópico más en relación a los
comportamientos de hombres y mujeres que no está corroborado por datos
objetivos y por investigaciones, más bien lo contrario. Así lo demuestran
algunos estudios realizados al respecto
La Dirección General de Tráfico publica
estadísticas muy detalladas relativas a la accidentalidad de las que se pueden
extraer datos suficientes por sexo que demuestran lo falaz que puede ser tal
afirmación.
Estos datos de siniestralidad de la Dirección
General de Tráfico, desmienten
esa absurda leyenda de que los hombres conducen mejor que las mujeres. La mujer se ve implicada en un número muy inferior de
accidentes que acaban en fallecimientos, en heridos
hospitalizados.
Hace unos años,
pocos, la Universidad Politécnica de Madrid y la Cátedra Eduardo Barreiros, hizo
público un informe según el cual “los
hombres son más arriesgados al volante, sufren
más accidentes y estos son más graves que los de las mujeres”.
En consecuencia, la información es falsa; es un bulo, una leyenda urbana o un cuento chino.
Aunque
no está recogido de forma específica en la normativa, la prohibición de conducir
con chanclas, descalzo y/o con el brazo
por fuera o apoyado sobre la ventanilla, sí
puedes ser sancionado si los agentes consideran que estos comportamientos
pueden afectar al control de
tú vehículo. En consecuencia tal afirmación
es verdadera.
Este aserto es falso. Fumar
mientras se conduce no está prohibido, pero no es aconsejable. Aumenta la
probabilidad de accidente y
es por ello que los conductores fumadores están implicados en el doble de
accidentes que los no fumadores.
Los efectos que esta acción puede tener sobre el conductor
son:
· Posibilidad
de distracción y pérdida de maniobrabilidad al encender un cigarrillo, sacarlo
del paquete, etc.
· Inutiliza una
de las manos y genera problemas de visión a causa del humo.
· Puede incluso
disminución de la capacidad de atención
debido al aumento del monóxido de carbono en la sangre.
Fumar
al volante de ni coche no está prohibido; en consecuencia la afirmación es verdadera.
Pero
a pesar de eso, tenemos que tener claro que aunque no está prohibido el hecho
de fumar, pero podría ser sancionado, si el agente considera que está
provocando una distracción al volante, siendo la sanción de hasta 100
€.
Lo que sí está prohibido es tirar la colilla por la
ventanilla y conlleva la pérdida de 4 puntos y multa de 200€.
Quince
alcaldes de España cobraron más
de 80.000 euros en el 2020. Estos
sí que son salarios dignos y no los que cobran la mayoría de ciudadanos y
ciudadanas de este país.
El salario
medio de los alcaldes españoles en 2020 se sitúa en los 13.741 euros. Pero hay que tener
en cuenta que hubo 2.504 alcaldes –el 36,86
%– que no cobraron por
ejercer su función.
Si
excluimos a estos que desempeñan su
cargo gratis, la retribución media de los alcaldes se elevaría hasta los 21.763
euros. Esta cifra crece de manera notable entre los que tuvieron dedicación exclusiva; fue de 40.033 euros.
El alcalde que más ha cobrado en 2020 ha sido el de
Madrid con 108.518 euros, seguido de la alcaldesa de Barcelona con 100.000
euros
Si
relacionásemos el número de habitantes de cada municipio con el salario
percibido por su alcalde, veríamos que no todos los españoles y españolas
aportamos la misma cantidad para cubrir
el salario de nuestro regidor. El de Madrid sería el regidor que más barato sale a sus ciudadanos
(0.30 €).
Por
comunidades autónomas, los alcaldes de la Región de Murcia fueron los que más cobraron de media por ejercer su puesto (43.961 euros),
seguidos de los de Baleares (39.192 €) y Canarias (37.638 €). En el extremo
opuesto se sitúan los de Castilla
y León, con apenas 3.062
euros de media, Aragón (3.642
€) y La Rioja (4.933 €).
Falta
la alcaldía de Cádiz de la que no hay datos en el sistema ISPA.
En la siguiente tabla vemos los salarios de los alcaldes de la comarca de la Sierra de Segura. Falta la alcaldía de Hornos.
Las tablas están elaboradas con los datos ofrecidos por 6.793 alcaldías. Es incompleta porque hay 1.063 ayuntamientos. El de Hornos entre ellos) que no los incluye el sistema de Información Salarial de Puestos de la Administración (ISPA) por haber aportado información dudosa o incompleta.
(Fuente: Ministerio de Hacienda.
Sistema ISPA)
Mientras mi hemana crecia sana, yo casi me convertí en un niño enfermizo y enclenque hasta que cumpli los diez u once años. No habia virus o bacteria que no se ensañara con mi cuerpo. Sarampión, varicela, tifus, paperas, catarros, tosferina o cualquier otra enfermedad que pululara por el pueblo, yo era un buen candidato para cualquera de ellas. Mi madre pensaba, con no falta de argumentos, que yo era un niño enclenque y enfermizo y que necesitaba vitaminas. Por eso, durante un tiempo un par de días a la semana por la mañana y antes de irme a la escuela “Elcura”, me daba un ponche.
En un vaso grande ponía la yema batida de un huevo, leche y añadia un vasito de vino de quina. Del aquel vino se decía que tenía efectos saludables. “Es medicina y es golosina”, decía el lema de Quina Santa Catalina. “Este excelente vino quinado es muy bueno para niños y mayores”, rezaba el de Kina San Clemente.Uno de aquellos días, a mi madre se le debió ir la mano y puso
más vino de quina de lo acostumbrado y yo salí de casa más ufano que ningún
otro día. Enfile la mal de contento la calle “Arroyo”, cruce la Plaza de la
Iglesia y bajé la calle Nueva, hoy “San Isidro”, hasta la escuela. Aquella mañana la lección
que teniamos que llevar aprendida trataba de los huesos y musculos del cuerpo
humano. Yo eufórico los recordé todos, incluso ese que tanto me costaba con
tantas silabas llamado cleidomastoideo.
Nunca lo he olvidado.
A lo mejor ahora, a mi edad, debería
empezar a tomar aquel tipo de ponche y la neuralgia posherpética que padezco
hace un tiempo provocada por uno de aquellos virus que atacó mi cuerpo de niño
y que ha permanecido dormido en él hasta que el muy jodido ha encontrado las
condiciones adecuadas para atacar de nuevo.
De niño, la varicela y a mis setenta y pico, la neuralgia postherpética,
la llamada “culebrilla”. Dos ataques del mismo virus en distintas épocas de mi
vida, pero yo sigo acordándome del esternocleidomastoideo.
La leyenda se remonta a los años setenta del siglo pasado, aunque hay quien dice que es mucho más antigua. Al
parecer, en la época que no existía el automóvil, la chica paraba a un jinete o
al mayoral de un coche de caballos. Según ha ido evolucionando el medio de
transporte, ha evolucionado la historia.
En casi todas las carreteras peligrosas del mundo
existe la “chica de la curva”. Casi todos los casos son leyendas urbanas que pasan de generación en
generación y de boca en boca; historia que te cuenta uno al que se la contó su
vecino porque le ocurrió a uno de su
pueblo. No hay nada que pueda indicar que todo se deba a una alucinación, a una
casualidad, o forme parte de un mito o de una historia de miedo o que sea de
verdad.
Una joven cuyo cuerpo y espíritu siguen vagando sin
rumbo por las carreteras del país. Durante todos estos años no han faltado
los testimonios que
dicen haberla visto, pero ninguno ha podido aportar prueba alguna.
Los que han
dedicado tiempo a su estudio concluyen
que se trata de una especie de hada madrina, una figura que ha fascinado al
hombre desde siempre.
Son muchas las leyendas de personas fallecidas que deambulan por las
carreteras, pero esta de la chica de la curva es la que más impacto ha tenido
en los conductores que han quedado pasmados y con los nervios de punta, pero
este hecho, inexplicable hasta el día de hoy erizan nuestra piel sin poder dar
una explicación coherente cuando nos lo cuentan.
En una curva de la carretera que sube a Segura, o en otra tan distante como
las
famosas curvas del Garraf de Barcelona, o en una de la carretera que
lleva a Rio Madera, un amigo de un amigo de su vecino asegura haber visto a la
joven en una noche cerrada.
La narración que me llegó hace algunos años fue de alguien que afirmaba ser
amigo de uno que dijo ser testigo directo. Así me la contó, y así os la cuento:
“Era noche cerrada y empezaba a
llover; nuestro testigo acciona el limpiaparabrisas, desconecta la radio y centra toda su atención en el asfalto que tiene
delante y que se difumina cada vez más por el mal funcionamiento de las
escobillas del limpia. Tengo que cambiarlas, se dijo a si mismo mientras le daba una velocidad más rápida al dispositivo.
A medida que avanzaba se notaba
más y más tenso. Nunca le había gustado conducir de noche y menos con lluvia. Pero
en aquella ocasión no tenía más remedio si quería dormir en casa.
La imagen que acaba de
escudriñar, ya casi a su altura, no encaja dentro de su lógica, pero lo cierto
es que un pensamiento de empatía y solidaridad le hizo detenerse una vez que la
había rebasado. ¡Pobrecilla! Con esa ropa tan veraniega y sin paraguas se va a
poner hecha una sopa en un sitio tan solitario y desolador.
No supo muy bien por qué, pero
un impulso le hizo poner la marcha atrás
y recular unos metros, hasta donde estaba ella. Esta abrió la puerta y con
semblante apesadumbrado le pidió que si podía acercarla hasta el próximo
pueblo. La chica subió y se acomodó en el asiento trasero, el del copiloto
estaba ocupado con una bolsa.
Guillermo, que así se llamaba
nuestro protagonista, puso la primera y enfiló la carretera con su conciencia
tranquila porque creía que estaba actuando correctamente. De haber sido él, en
lugar de la chica, le hubiera gustado que así lo hiciera el primer conductor
que pasase.
Después de recorridos unos
kilómetros, ambos permanecían callados. Pronto llegaron a donde la calzada
empezaba a serpentear. Las curvas eran cada vez más pronunciadas y la chica le pidió
que redujera la velocidad, que tuviera cuidado, que esas curvas eran
peligrosas, que había muchos accidentes y en no pocos casos eran mortales.
— En la siguiente curva me maté yo en una
noche como esta.
Al escuchar semejante
afirmación, un frio hiriente le recorre todo el cuerpo y se percata de lo terrorífico de las
palabras de la chica, y casi sin pensar, pisó a fondo el pedal del freno hasta
detener el vehículo al inicio de la curva.
—¿A mí me vas a dar consejos…?
Soy un conductor excelente, sin ningún accidente en mi historial.
Era la respuesta que iba a
soltarle a la chica, pero no pudo articular palabra alguna porque al mirar por
el espejo retrovisor interior se percató de que no había ninguna chica en el
asiento trasero. Tuvo que girar la cabeza y comprobar que así era.
El terror se apoderó de
Guillermo, que tembloroso apartó su automóvil al lado derecho. Se bajó e
incompresiblemente rodeó el coche a ver si estaba. Anduvo unos metros por
delante y por detrás del vehículo en una absurda busca de la joven, pero como era de suponer no dio resultado. No había
rastro alguno de ella. Se pellizcó la cara por si aquello era un sueño.
Con el susto en el cuerpo
reinicio la marcha a una velocidad más lenta de la que era habitual en él.
Mientras recorría aquellas curvas pensó en parar en el próximo pueblo, buscar
el cuartel de la Guardia Civil y poner el caso en su conocimiento. Pronto lo descartó
y se dijo así mismo: Si lo cuento, lo primero que me harán, antes de tomarme
declaración, es la prueba de la
alcoholemia. ¿Quién me va a creer?
Puso la cuarta y enfilo la
carretera con el deseo de llegar a su casa cuanto antes.
Guardó su secreto durante años por miedo a hacer el ridículo si contaba
aquel esperpéntico e inexplicable suceso. Con el tiempo hasta tuvo dudas de si fue
real aquello que le había sucedido; ¿ fue una aparición o fue una alucinación o
aquello nunca le ocurrió?
Leyenda o no, invención
o fantasía hay opiniones para todos los gustos. Lo cierto es que el
misterio de la chica de la curva sigue sin ser resuelto. La leyenda
se hizo famosa en la década de los setenta del siglo pasado. Desde entonces son muchos los
conductores que aseguran haber llevado una joven que deambulaba por la carretera
en las frías y oscuras noches de invierno.
Nadie sabe a ciencia cierta cómo murió la joven. Algunos afirman que había
muerto al volcar su automóvil, otros que fue atropellada por un camión cuando
iba en su bicicleta; unos la describían rubia y se aparecía con un vestido
blanco, otros que morena y vestía de negro. Pero en cualquier caso ha resultado
imposible dar con un testigo directo de aquel suceso.
Muchos medios se hicieron eco de la noticia como el vespertino Catalunya
Exprés o la revista Blanco y Negro, pero nada se pudo comprobar acerca de la
joven que aparecía, especialmente en las carreteras de Majadahonda (Comunidad
de Madrid). La leyenda sigue vigente.
¿Leyenda, mito o alucinación? No lo sé, pero quien me lo contó, creía ser
cierta. La considero una persona seria equilibrada, culta y poco dicharachera,
pero como él dice, desde que a le contaron el episodio de “la chica de la curva” se sumó
al grupo de aquellos que dicen que no
creen en las brujas, pero que haberlas,
haylas. Yo también me sumo.
La máquina de vapor fue inventada en 1705 por Thomas Newcomen, y posteriormente perfeccionada por J. Watt en 1 769. En 1787, Oliver Evans consiguió la primera patente para poder construir máquinas que funcionasen a altas presiones. Sin embargo no pudo construir la primera hasta 1805 cuando las autoridades de Filadelfia le encargaron un pontón para dragar los muelles del puerto de Filadelfia. Una vez construida la draga, e instalada en ella la máquina de vapor que la accionaría, se vio en la tesitura de tener que transportarla desde su taller hasta el muelle, que distaba unos 3 km. El artilugio pesaba más de 15 toneladas, y la tarea se presentaba complicada y muy dificil. Pero Evans pronto se las ingenió.Instaló un carro bajo el mismo, y acopló una de sus ruedas a la máquina de vapor. Falló en un primer intento, pero en un segundo, la draga llegó sin problemas hasta el muelle, donde se le quitó el carro. Nació de esta forma el primer vehículo movido por sí mismo y no por la fuerza animal. Fue el descubrimiento inicial que daría origen al vehículo automóvil, es decir, al movido por sí mismo.
Pronto
surgen tres países que se interesan por el estudio y desarrollo del automóvil,
Inglaterra, Alemania y los Estados Unidos.
Pretendieron ser un freno para el avance y
desarrollo del automóvil en Inglaterra y así los capitalista de la época pudieron
prolongar
sus inversiones en caballos, carruajes y trenes. Pero aquello fue como poner
puertas al campo. Quedó derogada en 1896.
Las
imposiciones de aquella ley eran ridículas y estrambóticas y lo único que
consiguieron fue ralentizar la evolución del automóvil en Inglaterra y
propiciar que le pasaran por delante Estados Unidos, Alemania y Francia en la
fabricación de automóviles.
La Ley de la bandera roja establecía que:
1.
Un ingeniero acompañase en cualquier trayecto al conductor,
para poder reparar de inmediato el automóvil en caso de avería, con el fin de
que obstaculizara el menor tiempo posible el paso de carruajes de caballos.
2.
Puso
en vigor el primer límite de velocidad en carretera del
mundo, estableciendo un límite de 6,5 km/h en
el campo y 3,2 km/h en ciudad, con una multa de 10 libras por “exceso de
velocidad”.
3.
Una persona debía caminar unos 55
metros por delante del vehículo, agitando constantemente una bandera roja para
avisar a los coches de caballos sobre la presencia del vehículo autopropulsado,
y asegurarse de que el conductor detiene el vehículo hasta que pase el caballo
o el coche de caballos. Además, esto ya limitaba la velocidad del vehículo a la
del hombre que llevaba la bandera roja.
En Alemania, Gottieb Daimier lanzó su famoso
motor de gasolina en 1885.
En los Estados Unidos, el desarrollo del
automóvil, se vio entorpecido igual que en Inglaterra, si bien por menos tiempo
y otras razones, una de las cuales fue la falta de carreteras y la actitud de
los granjeros, que impedían el paso de los vehículos por sus tierras. La
fabricación de motores para usos agrícolas, realizada en 1887 por Ramson E.
Olds, consiguió interesar a los agricultores en el desarrollo de los vehículos
automóviles. El primer automóvil americano movido por motor de gasolina fue
construido y utilizado con éxito por Charles E. y Frank Duryea en 1892, es
decir, tres años antes de que Selden (en otra ocasión escribiremos sobre él) lograra
su patentr, origen de tantas disputas.
Los balbuceos y ensayos realizados en el siglo
XIX se convierten en realidad en el siglo XX. La fabricación de vehículos de motor
se perfecciona, no sólo en lo que se refiere a los órganos vitales de los
mismos, sino también por lo que respecta a carrocería y comodidad para el pasajero.
En un
primer momento, cada vehículo disponía de dos placas identificativas, la del
ayuntamiento con la que se podía circular por el municipio y la del gobierno
civil que ampliaba así los límites de la provincia.
Fue en 1900 cuando se inicia en España el control administrativo
de los vehículos de motor, matriculándose el 31 de octubre de aquel año, en
Palma de Mallorca, el primer automóvil: un vehículo de la marca «Clement», tipo
cuadriciclo a nombre de José Sureda Fuentes, vecino de Santa Catalina, un
barrio de Palma. La Matricula fue PM-1.
El segundo
se matriculó, un mes más tarde (18-11-1900), fue otro «Clement», con la matricula CC-1, a
nombra de Favián Muñoz Servan, vecino de
Plasencia (Cáceres).
En
1911 comenzó una serie de quinquenios en el que las matriculas de vehículos
aumentaban a ritmo vertiginoso.
En
periodo de 1916 a 1920, como podemos ver en el gráfico las matrículas aumentaron
de forma espectacular. Este incremento de vehículos duró hasta 1930. El parque
de vehículos al finalizar este periodo era ya de 151.455 vehiculos. En los años
sucesivos las matriculas de vehículos fueron descendiendo hasta el periodo de
1936 a 1939 que solo se matricularon en toda España 24.110 vehículos; causa,la
guerra civil española.
En
el 2019, el parque era de 34.434.791 vehículos